Después de librar al club de su deuda, Aulas reestructuró la administración del club y reorganizó las finanzas y, en un lapso de dos décadas, transformó al club de un equipo de segunda división en uno de los clubes de fútbol más ricos del mundo. Su organización está a cargo de la Federación Colombiana de Fútbol por lo cual participan en las competencias organizadas por la CONMEBOL y la FIFA.